El pasado viernes 7 de agosto, unos 60 niños de la zona de la Vuelta de la Paloma de Ocoa fueron beneficiados con la entrega de mascotas, lápices y sacapuntas por parte de la Fundación Haz Un Niño Sonreir que dirige Johnny Báez.
La Unión de Ocoeños en Nueva York formó parte de esta entrega en la persona de Brandelys Guerrero y Johnnny Báez, quienes llegaron a Ocoa por una semana a realizar una serie de donaciones a gente humilde de nuestro pueblo. Los padres de la zona agradecieron el gesto de ambas instituciones radicadas en Nueva York.
La Unión de Ocoeños en Nueva York formó parte de esta entrega en la persona de Brandelys Guerrero y Johnnny Báez, quienes llegaron a Ocoa por una semana a realizar una serie de donaciones a gente humilde de nuestro pueblo. Los padres de la zona agradecieron el gesto de ambas instituciones radicadas en Nueva York.
El ocoeño Johnny Báez de la Fundación Haz Un Niño Sonreir y que realiza diferentes actividades en NY para conseguir esta ayuda para los niños de Ocoa, manifestó su satisfacción de poder hacer la entrega de útiles escolares a niños que de una manera u otra se le hace muy difícil conseguir una mascota.
Les recalcó también que no era una actividad política, ya que estamos en campaña y se podría confundir. Simplemente es una ayuda que ha venido dando hace mucho tiempo en diferentes sectores pobres de San José de Ocoa y otros lugares de RD donde los niños necesitan apoyo.
Esta entrega se hizo en conjunto con la Pastoral Juvenil Caminando con Jesús, que es un equipo de jóvenes que pertenecen a la iglesia católica y que Johnny siempre le ha solicitado su colaboración para este tipo de actividades y una vez más le agradeció su ayuda.
La Fundación y La Pastoral Juvenil también visitaron el Hogar de Ancianos de Ocoa y les dejaron juegos de dominó y barajas que es una actividad que le gusta mucho a los ancianos y pasan buen rato jugando y divirtiéndose.
Ocoa necesita más personas e instituciones como Johnny Báez y su fundación, que de manera desinterezada y dentro de sus posibilidades hacen un aporte a la comunidad que los vió nacer llevando una sonrisa a esos niños que por alguna razón del destino, la vida no siempre les ha permitido sonreir, y este gesto puede ser el inicio para que mañana puedan ser felices.
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