El próximo primero de enero 2010, San José de Ocoa cumplirá 9 años como provincia y ha tenido sus altas y bajas como tal. El proceso de evolución ha sido lento, pero los ciudadanos no ven ese avance significativo, salvo escasas excepciones. Al ser segregados de la provincia Peravia, el ayuntamiento ha percibido más recursos económicos, tenemos senador, dos diputados y comunidades elevadas a municipios y otros a distritos, cosa que significa avance. Ahora bien, tanto los representantes de los diferentes ayuntamientos como los representantes congresuales no han hecho el papel que la sociedad ocoeña espera y su progreso personal dista mucho de lo que ha sido el avance de la provincia en estos últimos 9 años, convirtiéndolos en los grandes beneficiarios del nuevo status de Ocoa. Por otro lado, los gobiernos, a través de sus diferentes secretarías han hecho muchas cosas que han dado un avance a Ocoa en su condición de provincia, aunque las gobernaciones tampoco han jugado su mejor papel. Para poner un ejemplo, en cultura y educación hemos avanzado, pero en deporte ha habido un retroceso y así sucesivamente. Lo cierto es que Ocoa ha podido avanzar más, pero como en todos lados, los intereses personales son más fuertes y la esperanza de una verdadera provincia aún está lejos, pues si a juzgar por los pre-candidatos que se han presentado como las posibles autoridades, el panorama no es muy haragueño.
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