Labrando Sueños

Siempre se ha dicho que Ocoa es una provincia sin muchas fuentes de empleos y en cierta forma hay mucha razón en eso. Ahora bien, hay mucha gente que no le gusta trabajar o quieren un empleo donde tengan que hacer poco y ganar mucho. Ocoa como provincia agrícola tiene mucho empleo en el campo, lo que pasa es que muchos entienden que el pago no es justo. Pero que justo es que un niño tenga que ir en la mañana a trabajar de limpiabotas, para luego bajo el fuerte sol del mediodía dirigirse a su casa y prepararse para ir a la escuela, probablemente, como en la mayoría de los casos, hijo de una madre soltera que ha tenido que cargar sola con su manutención y educación, por lo que tiene que buscar una ayuda y sólo tiene el recurso de un niño jugando el rol de su padre y que ha tenido que olvidarse de los juguetes y entender a temprana edad el sacrificio de sobrevivir en un mundo de "vivos".

También hay gente que se ha pasado la vida entera trabajando como si fueran a vivir eternamente y tienen que hacerlo porque en el trabajo informal no existe la pensión, más bien el conseguir lo de su comida diaria, poner buena cara ante cada uno de sus clientes y verse feliz, aunque al final del día tenga que acostarse con la triste realidad de un día en el que se ganó 200 pesos y gastó 250, además de orar a Dios por no enfermarse y poder al día siguiente vender su producto de esperanza para vivir, pero también con la satisfacción y el convencimiento de estar haciendo lo correcto y la tranquilidad de saber que la sociedad reconoce su digno papel y le permite vivir en libertad.
Pero también los jóvenes que no han tenido grandes oportunidades de estudiar, tienen que sobrevivir trabajando en el día para luego ir a estudiar en la noche y buscar un mejor futuro que lo guíe en la creación de una familia con pasos firmes en una sociedad donde el principal objetivo de los malos vicios son los jóvenes, que a veces son deslumbrados por lujosos vehículos, grandes mansiones y una aparente vida llena de felicidad que por lo regular no dura mucho. Como jóvenes tienen que ser parte de los nuevos tiempos, pero no permitir que esas cosas les llenen de ilusiones, pues son conseguidas a base de dañar a otros y como jóvenes debemos tener la capacidad de entender que la vida plena se consigue haciendo lo correcto.
Cuando hay falta de empleo se buscan los medios para trabajar y eso está en la conciencia de cada persona y la mayoría de veces en la necesidad. Si alguien no quiere trabajar, no importa que le busquen todas la facilidades, que siempre buscará una excusa para no hacerlo. Es cierto que no es tan fácil conseguir un empleo en Ocoa, pero también es cierto que hay muchas maneras de buscarse el sustento, pues a menudo vemos personas que vienen de otros pueblos con mercancía para vender y logran su objetivo, porque cada vez vuelven, lo que sucede es que muchos piensan que eso no es trabajo para ellos y prefieren quedarse vagando, porque tienen más necesidad de pan que de respeto.
Limpiar botas es un trabajo y en un 90% a un 95% los limpiabotas son niños y según sus derechos hay que protegerlos contra cualquier trabajo que entorpezca su educación. Sería lo ideal cambiar todos estos niños limpiabotas por adultos, pero no lo ven como un trabajo para ellos, posiblemente por la costumbre y mayormente por la recompensa. A pesar de que en Ocoa no hay fuente de empleos, siempre hemos sido un pueblo trabajador en su gran mayoría, pero se necesita cambiar la actitud de muchas personas y llenar cada mañana de optimismo, salir y poner en práctica el deseo de ser útil, labrando con nuestras manos los sueños que por más difícil que parezcan, sólo se logran con su firme convicción de que se puede.