Los habitantes de la Vuelta de la Paloma a la entrada de Ocoa son personas humildes y a pesar del alto grado de analfabetismo en la zona, su educación con el trato a los demás sobre pasa los límites de muchos que han ido a una escuela. En el lugar vive Doña Felicia, dueña de un talento único para colar café, pero también para sonreír a todo el que llega y brindarle una humilde silla y la atención que se merece una visita. Hace unas dos semanas que recibió un tanque lleno de comida procedente de Estados Unidos de parte de la ocoeña Elyn Tejeda, quien ha estado pocas veces en el lugar, pero le bastó para hacer un esfuerzo para agradar y tener un gesto de solidaridad con Doña Fela, que vive ahí tras el paso del ciclón David y la tormenta Federico. Saludamos este gesto de Elyn y su buena voluntad de ayudar a una humilde compueblana, sin esperar nada a cambio.
jueves, 8 de julio de 2010
Un Gran Gesto
Los habitantes de la Vuelta de la Paloma a la entrada de Ocoa son personas humildes y a pesar del alto grado de analfabetismo en la zona, su educación con el trato a los demás sobre pasa los límites de muchos que han ido a una escuela. En el lugar vive Doña Felicia, dueña de un talento único para colar café, pero también para sonreír a todo el que llega y brindarle una humilde silla y la atención que se merece una visita. Hace unas dos semanas que recibió un tanque lleno de comida procedente de Estados Unidos de parte de la ocoeña Elyn Tejeda, quien ha estado pocas veces en el lugar, pero le bastó para hacer un esfuerzo para agradar y tener un gesto de solidaridad con Doña Fela, que vive ahí tras el paso del ciclón David y la tormenta Federico. Saludamos este gesto de Elyn y su buena voluntad de ayudar a una humilde compueblana, sin esperar nada a cambio.
Un Gesto maravilloso de esa joven, con personas asi es que los pueblos progresan... ojalá y alguien se digne a ponerles el agua a todas esas gentes de esa Zona, ya que pasan todas las crugias del mundo. Como viajo mucho a ocoa cada vez que vengo en las mañanas de los lunes me deprimo al ver tantas personas cargando galoncitos de agua. Cuanto trabajo pasan Dios mio.
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