jueves, 5 de noviembre de 2009

Un Enemigo Silencioso

San José de Ocoa es uno de los pueblos más limpios del país, un clima envidiable y unas montañas de exquisita belleza. Todas estas cualidades se ven amenazadas por un enemigo que de manera callada va contaminando el ambiente y la salud de las personas. Este enemigo es el basurero que se encuentra a un lado de la carretera que comunica Ocoa con El Pinar.
Hace las veces de pocilga como se puede ver en la foto. Puercos, galzas, vacas y gallinas están día a día allí y lo hacen su hogar, donde la especie que predomina es el cerdo. Esto se convierte en otro problema para las personas, pues estos cerdos luego son el manjar de muchos y no deben ser criados en esas condiciones. Nadie pone un control a esto y está a la vista de todos.
Cuando se le prende fuego, el humo es inmenso y cuando se remueve el mal olor es nauseabundo que llega a todo el que pasa por la carretera, atentando con la salud de los ciudadanos. Para los pueblos ser limpios hay que recoger la basura y hay que llevarla algún lado, pero creemos que este no es el mejor lugar, pues hay toda una comunidad productiva que tiene que pasar frente a él y les afecta grandemente. Los basureros siempre van a ser problema y un tema de debate, pero debatiendo es que se solucionan los problemas y la esperanza de un diálogo es muy pobre.

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